No son pocos los medios de prensa, y sobre todo las redes sociales, que se han hecho eco de un supuesto acuerdo de divorcio entre Su Majestad el Rey Don Felipe y la reina consorte, Doña Letizia.
Al parecer, los reyes atravesaron una dura crisis matrimonial en 2013, justo el año en que estalló el caso Nóos, que involucró a los entonces Duques de Palma. Ese escándalo habría sido agua bendita llovida del cielo para los reyes, tapando todas las infidelidades y desviando la atención del público a cuestiones menores, que se resolvieron adecuadamente.
Así las cosas, al parecer, hubo supuestamente un acuerdo de divorcio, en el que Don Felipe le ofrecía enormes privilegios a Doña Letizia, incluyendo cientos de millones de euros, a cambio de que ella renunciase a la custodia de las niñas.
Este acuerdo fue filtrado precisamente por Jaime del Burgo, al legendario periodista Jaime Peñafiel, pero no contó todos los detalles del mismo. Hasta ahora. Del Burgo lleva las últimas semanas publicando, a cuentagotas, escandalosas afirmaciones sobre presuntas infidelidades al rey Don Felipe, viajes a Londres y Nueva York con Doña Letizia, y el famoso acuerdo de divorcio. Y no para de insistir en que está en posesión de pruebas gráficas que demuestran sus afirmaciones, pero por ahora no ha presentado ni una.
Ahora resulta que, según dicen, Don Juan Carlos y Doña Sofía insistieron a Don Felipe y Doña Letizia para que no dieran el paso, no se divorciasen, y guardasen las apariencias cara al público, como han hecho ellos toda la vida, aunque luego en privado puedan vivir como les venga en gana.
Mientras tanto, Del Burgo dijo que Doña Letizia le confesó, en privado, que nunca ha estado enamorada de Don Felipe. Que todo lo hizo por ambición, para llegar a ser una persona muy importante.
Precisamente por eso, supuestamente, recordemos que todo esto es supuestamente, Doña Letizia habría rechazado el acuerdo de divorcio multimillonario, porque querría seguir siendo reina a toda costa.
Todo esto nos lleva hasta el día de hoy. Así las cosas, los reyes estarían llevando una doble vida. Cara al público son un matrimonio ejemplar, pero en privado cada uno hace su vida.
Vamos, que los reyes serían a día de hoy una pareja de influencers.
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